El incremento en la expectativa de vida y la probabilidad de
supervivencia ha generado cambios importantes que afectan de manera
considerable el presupuesto y patrimonio de las familias. Nuestra esperanza de
vida se encuentra sobre los 85 años de edad y la probabilidad de alcanzar los
65 años, es de 85%; ¿De dónde sacaremos el dinero para vivir dignamente durante
nuestra vejez?
Necesitamos comenzar desde ya un plan de ahorro garantizado,
que nos permita acumular el capital suficiente para mantenernos de por vida.
El plan tiene que ser garantizado; no puede estar sujeto a ninguna
circunstancia distinta al hecho de que podamos cumplir cabal y oportunamente
con los pagos regulares periódicos que debemos realizar para mantener su
vigencia y culminar con nuestra parte
del compromiso; y, simultáneamente, disfrutar de un seguro en caso de muerte,
enfermedad grave o incapacidad, para protegernos ante la eventualidad remota
de alguna de tales circunstancias.
Sabemos que éste plan solo es posible obtenerlo mediante un
seguro de vida adecuado para tal fin. De nada nos sirve tratar de buscar
instrumentos financieros diseñados para satisfacer otras necesidades o que no
garanticen los beneficios contratamos en términos de una Suma de Capital fijo o
una Renta Fija previamente determinada.
Los seguros de vida con capitalización a tasa de interés
fija, son los instrumentos financieros adecuados para garantizar los beneficios
financieros esperados; ya que, los mismos se encuentran especificados de esa
manera en el texto de las pólizas. Esta es la única manera que existe,
legalmente, de que el contratante o beneficiario de un plan de seguro pueda disfrutar
de una verdadera tranquilidad en ese sentido.
Si deseas conocer más sobre el tema, adquirir un plan de
este tipo o dedicarte a desarrollar una carrera en ventas de seguros de éste
tipo, no dudes en contactarnos que con gusto te atenderemos personalmente para
evaluar tu solicitud, sin ningún compromiso.